El lubricador automático PERMA se atornilla directamente junto al punto de lubricación. Trabaja de manera independiente y se activa al ajustar el periodo de descarga. Su ventana transparente permite comprobar en todo momento el nivel de lubricante. PERMA resulta ideal para realizar trabajos exigentes: Puntos de lubricación de difícil acceso, aplicación en zonas de riesgo o en puntos que
en otro caso podrían pasarse por alto. Los diferentes puntos de lubricación recibirán todos los días la cantidad de lubricante requerida. Evita daños por cantidades excesivas o insuficientes de lubricante, convirtiendo expensas excesivas en mantenimiento y reparaciones en cosa del pasado.
El volumen de descarga puede ajustarse también en servicio. PERMA resulta apropiado para temperaturas comprendidas entre -20 y +55 ºC. Su variado programa de accesorios ayuda a solucionar problemasde lubricación cotidianos y facilita el montaje del dispensador.